15 octobre 2015

Nos matan

CHE, vos,
nos matan, nos están matando
una a una GOLPE
y grito, y aullido, y oídos cerrados
nos matan
nos están matando
pupilas fijas, una a una, GOLPE
cuchillo en mano clava, hasta nunca y siempre,
pupila amiga, aullido en fuga,
siempre
tres renglones en la página veinte del diario
y mañana
su olvido y mi llanto,
su olvido y mi llanto y GOLPE en la mesa desayuno mi impotencia
y la de ella y ella y ella y ella
tres renglones una vida entera
toda muerta ¡PAF! pupilas fijas
nos matan
nos están matando
y afuera todavía árbol y poste y semáforo y vereda
para mí todo lo mismo, todo mezclado, pupilas arden
shh… no cedas al llanto
no cedas
¡NO CEDAS!
llanto.
Hormigas en mi sangre y gusano en su arteria
cuerpo helado, cuerpo frío, por favor
reciban
a éste, tibio
porque una vez más una más
allá va, tres renglones, una más
una más una más cuántas más
(muchas más)
NO CEDAS
nos matan nos están matando
nos atan la garganta
nos muelen a palos
como café
café frío que estoy desayunando para bajar la impotencia se me atora en la garganta junto a tu cuerpo tibio y asediado GOLPE
pupila fija, sube el fuego del estómago a los labios
este incendio no se apaga sólo con llanto
este incendio
no se apaga
la mirada, como siempre, un infierno
una a una, arde, quema, no cedas
¡NO CEDAS!
No cedas, pupila, sé infierno
Infierno en duelo pero infierno
siempre fuego.

*
*


9 septembre 2015

Serie "La hora de los trenes" (Frag.)


a Susi.


               1

y había agua y luz
una fuente, velas,
voces que viajaban como trenes en mi espalda
allá
todo siempre acontecía
atrás.

El pueblo murmuraba los nombres de sus muertos:
…Emilia, Flora, Paco, Juan…
Funerales constantes
de flores marchitas e historias sin eses.

Hoy es viernes seis de agosto.
Hace once años él cumplía doce
y mientras pensaba los deseos
la fuente agrietaba el silencio.
Hoy es seis de agosto y extraño las velas,
la sombra líquida de las manos de mamá,
no recuerdo los gestos
de Emilia, Flora, Paco y Juan
ni tengo regalos para el cumpleañero.
Hoy, en algún lugar muy lejos
él apaga sus velas, inventa deseos,
y en mi cocina una canilla
gotea al ritmo del reloj.

El color de la memoria se diluye cada vez que pestañeo.
El pasado es un arco iris sin sol.


                2

A cierta hora del día
(siempre la misma)
el paisaje se cerraba y la oscuridad
custodiaba al pueblo.

Toque de queda y ejércitos de grillos.

En casa
el calor de una tarde soleada se apretaba en las paredes
mientras ella cocinaba.

Todas las noches
entre mi hambre y el de mi hermana
el silencio se sentaba a la mesa
y reclamaba su alimento.

Mamá le daba nuestra sangre.


                3

No pasa el tren de las seis
y el andén calla
como si fueran las tres de la tarde.
Solo escucho la voz de Lidia
desdibujada
arrastrada por una brisa tibia hasta las vías
donde todo pesa más.

Con las piernas cruzadas
las manos sin boleto que arrugar
la respiración acelerada
espero un tren que no llega.

Entonces, empujada por la tarde,
toda mi infancia baja al andén:
los dedos de la tía en el tejido
el tedio de mis hermanas cuando la siesta
se lleva hasta las ganas de jugar
la primera bicicleta y los paseos
de cara al río donde el paisaje se aleja y traza una pregunta.

La memoria de esos años enlutada
llena de tierra
como los rincones de la casa de la abuela
que hoy
estrena otra familia
sin niñas.

Baja la barrera
miro por última vez la calle de tierra.
Atardece en el horizonte
todos los instantes se acuestan en el sol.

*
*

A.M.P

15 mars 2015

Plegaria


Que sea un silencio de arena
lo que nos hiere la garganta a la hora de gritar.
Que guarde promesas de mar
entre sus ásperas células.

*
*

A.M.P